7 reflexiones sobre la salud mental en adolescentes

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7 reflexiones sobre la salud mental en adolescentes

La pandemia del COVID-19 trajo consigo palabras que probablemente jamás habíamos escuchado antes y, por otro lado, aportó visibilidad y sensibilización a otras palabras que sí habíamos escuchado, pero que probablemente no estaban tan presentes. Entre estas últimas está el término salud mental. Hablar de salud mental tenía per se una connotación negativa y algunos conceptos (estados) relacionados como depresión, ansiedad, ira, frustración… han empezado a estar más presentes en nuestras conversaciones cotidianas.

Si bien estas alteraciones del ánimo han estado presentes en toda la población durante la pandemia, desde Psicólogos del Deporte Online consideramos que la salud mental en adolescentes se ha visto sensiblemente afectada en los últimos años. Por ello, nos ha parecido oportuno compartir con vosotros y vosotras siete reflexiones que entendemos que están afectando a la salud mental de nuestros jóvenes.

Con ello no buscamos más que la reflexión individual que cada uno de nosotros pueda hacer en relación a estas cuestiones. No pretendemos que sea ninguna guía o receta mágica que cualquier padre o madre tenga que revisar en relación a la salud mental de su hijo o hija.

Transformación social e incomprensión

En los últimos 50 años España ha vivido grandes transformaciones sociales y económicas. El bienestar y comodidad ha llegado a muchas capas de la población provocando cierto “adormecimiento” para seguir consiguiendo mejoras. Paralelamente lo individual toma más importancia que lo grupal y suele dificultar la identificación con el otro (“Cada uno es único”). Este fenómeno nos puede ayudar a entender la paradoja de nuestros días. En los que estamos (aparentemente) más conectados entre sí que nunca, pero a su vez crece el sentimiento de soledad e incomprensión por parte del resto.

Sobreprotección

Sobreprotección excesiva desde el minuto 1 de vida. Formamos parte de una Generación de padres y madres más preparados que asumimos conocer la receta para “crear hijos perfectos” pero, ¿realmente conocemos cuáles son sus necesidades más allá de lo que nosotros como padres queremos para ellos?

Forzados a ser productivos

Ritmo de vida frenético. Se suele tener muy poco tiempo para compartir con ellos. Está calando cierto mensaje de “tiempo de calidad”, en el que solemos encontrar consuelo ante estas dinámicas. Tenemos dificultades para reducir nuestra actividad, incluso en momentos de ocio, ¡está prohibido aburrirse! Incluso las vacaciones y momentos de descanso se suelen contemplar como periodos productivos.

El mundo de ahí fuera

Paradójicamente en “las formas” se aumenta la sensibilidad para lo políticamente correcto mientras que el sistema político/económico occidental es más salvaje. Las nuevas generaciones están siendo tratadas entre algodones a la vez que empiezan a ver e intuir que el mundo que les espera fuera es complejo y cambiante. Es probable que acaben desarrollando sentimientos de desesperanza y falta de motivación.

Inmediatez frustrada

Vivimos bajo el paraguas lo quiero, lo tengo. Aparentemente todo lo tenemos a “un par de golpes de click”. Este modelo no es válido en ámbitos de la vida como la educación, consecución de una carrera laboral, o las relaciones con los demás… provocando un aumento de la frustración. Por supuesto, el deporte es uno de esos ámbitos en los que no funciona ese “lo quiero, lo tengo”, y donde la persistencia y la tolerancia a la frustración es indispensable para conseguir metas ambiciosas.

La irrealidad de las redes

Sobreexposición a las pantallas y redes sociales sin la mediación de los adultos. Se enfrentan a la realidad virtual de las pantallas (que suele estar idealizada y muy sesgada) con pocos medios y espíritu crítico para reflexionar sobre lo que están viendo. En relación al deporte, en demasiadas ocasiones, la vida de los deportistas con más repercusión en redes sociales dista mucho de lo idílica que se muestran y suelen ver los adolescentes que sueñan ser como ellos o ellas algún día.

Demasiados estímulos

Mundo distraído, donde la capacidad de atención y de profundizar sobre temas complejos es cada vez menor. No tenemos el botón del “saltar intro” cuando llegan problemas o situaciones desagradables. En el ámbito deportivo, son muchos los deportistas, padres y madres, entrenadores/as que se quejan de la situación que pueden estar viviendo, pero ¿cuántos están realmente dispuestos a cambiar su manera de hacer para que la situación sea más adecuada?

Os dejamos una canción relacionada con esta última reflexión:


A modo de cierre nos gustaría apuntar que, a nuestro parecer, el deporte practicado en un contexto saludable puede ser una gran herramienta para mejorar la salud mental de los adolescentes que lo practican. Sólo nos queda reflexionar sobre nuestra responsabilidad dentro de ese contexto.

«Los tiempos difíciles crean hombres fuertes, los hombres fuertes crean tiempos fáciles, los tiempos fáciles crean hombres débiles, los hombres débiles crean tiempos difíciles». —Michael Hopf.

Comentarios (2)
Lili / 20/07/2023

Buenas tardes ,te escribo desde Colombia,necesito ayuda para un hijo deportista

Responder
Psicólogos del Deporte Online / 01/08/2023

Encantados de haberte atendido por videollamada, Lili.
Cualquier cuestión, estamos a tu disposición

Responder

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